La viola pertenece a la familia de la cuerda frotada y es un miembro importante de la orquesta sinfónica. Es muy similar al violín en cuanto al material y la forma de construcción, sólo que es un poco más grande. Sirve de puente sonoro entre el sonido del violín y el de los violoncellos ya sea en cuartetos como en cualquier otra formación orquestal. La viola tiene un gran poder expresivo y un timbre noble, cálido y rico. A pesar de ser un instrumento indispensable dentro de las agrupaciones camerísticas o, como hemos dicho antes, de la orquesta, la viola es la gran desconocida de la familia de la cuerda frotada.

Existen en el mercado violas de todos los tamaños, de manera que podremos empezar a estudiar con la garantía de que encontraremos un instrumento que se adapte perfectamente a nuestras necesidades.

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